Yayo !!!!! La épica al servicio de la sórdidez, el amor libre y las modelos de chichinabo

Da igual cómo te lo plantees: la épica siempre supera a la retórica. Tú puedes explicarle a tu mejor amigo, ése que jamás superó la época del Makina Total 7, que los Manowar no son sólo músculos y aceite, también son METAL y ÉPICA. Pero no lo entenderá hasta que le metas en un estadio con 15.000 histéricos peludos cantando "Black Wind Fire & Steel" a pleno pulmón. Y en ése momento, tendremos otro creyente...

...pero eso será en otro post, aunque viene a colación del artishta que os quiero presentar. En las oficinas de esta juguetería, cada dos semanas hay un nuevo ídolo. Lo sabrías si trabajaras aquí. Tuvimos a Capusotto, Falete, el Reno Renardo, Britney... hasta el Fary tuvo su momento de gloria (con la Mandanga sonando a cada momento). Ahora mismo, nuestro gran gurú de la sordidez es un argentino que a venido a reirse de las modelos de su país, que al parecer (algo las darán de comer raro por allá) no son capaces de vivir la alegría de la vida, con sus fobias y sus filias: atentos a este primer vídeo (tened en cuenta que es una broma, y demasiado bien se lo toma esta):


Sí, habéis visto y oído bien, eso ha sido... sexo duro y en directo, desde mi corazón hasta tus genitales, y en tu puta cara!! sólo por este vídeo, y aunque sea una broma, este gran poeta merecería estar en el olimpo de los dioses. Pero es que no sólo ha demostrado que en Argentina hay una modelo estrecha y estúpida, no!! Ha demostrado que MUCHAS modelos argentinas son estrechas y estúpidas






Atendé (como diría el gran Yayo) especialmente en el vídeo que sigue, a partir del minuto 3.50. Sólo un gran sórdido sería capaz de dedicar tamaña barrbaridad sin despeinarse, y encima tener los cojonazos de sentirse ofendido. Este tipo es grande, MUY grande:



Señores, la alegría de la vida y el sexo sin amor, pero con cuidado son dones que el Señor, gran hombre sórdido, nos ha puesto en el mundo para que los aprovechemos sin pudor y con una sonrisa (vertical). Negar este hecho es renunciar a la felicidad en su plenitud.

La ÉPICA que nos encontramos en estas canciones es la más grande de todas, el amor libre, sin concesiones, ni límites, ni vaselina.Así que, chicas del mundo, con el corazón en una mano (y no te digo el qué en la otra) os digo: Vení, vení vení...

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